soy un pésimo empresario. seguro no son buenas noticias para los accionistas de Industrias Dinosaurio ni para las casi quince personas que trabajan conmigo o para mí, pero sospecho que ya lo habían deducido por su cuenta. no es sólo que no tengo una verdadera visión empresarial o porque invierta grandes cantidades sin un plan de negocios o porque tomo decisiones fuertes sin consultar con nadie; no, no es sólo eso. creo que lo principal es que no me mueve tanto ganar dinero como intentar ayudar; al final, no me importa si la empresa no me regresa un peso siempre que se sostenga sola y le reparta a los demás. lo que resulta al final es que no ayudo a nadie: buscar dinero es una respuesta natural a la pregunta de cómo puedo ayudar más. por eso he prestado mis ahorros varias veces y nunca han vuelto; por eso mis malas empresas en las que no sé cobrar y termino pagando con lo que puedo, al final la pagan las personas mismas a las que quiero ayudar. no me voy a nombrar el gran filántropo, pero creo que mi causa es noble y mi exigencia sencilla: llevar un vida digna que me permita ayudar a los demás.