en la política nada es nunca entre las instituciones. por eso sabemos que la revolución institucional es una máscara. todo se hace entre las personas, entre los que tienen el puesto, entre los que firman y pueden dar órdenes. la política y los tratos se hacen todos entre personas y dependen de las personas, del humor de ellas, de lo que quieran en la vida, de sus creencias, sus aspiraciones y agenda política. esto no es intrínsecamente malo, si caso poco eficiente. lo único malo es vivir fuera del presupuesto. lo malo es que tu contacto pierda al suyo y el nuevo tenga nuevas ideas porque el proyecto no está fijo en la institución, estaba fijo en el contacto.
hay una razón muy obvia por la que es increíblemente difícil conseguir dinero para financiar el concurso nacional de la olimpiada mexicana de matemáticas: después de cierta cantidad de recurso, lo demás es un capricho. la cosa es que ese dinero no es para la ciencia o para la educación, es para un evento que es ridícula e innecesariamente caro con una tradición caprichosa. la olimpiada ni siquiera da recibo deducible de impuestos: es una inversión muy poco atractiva para la mayoría.
tengo una propuesta. no intentaré que entre en vigor desde este año por el claro conflicto de intereses, sin embargo quisiera presentarla para su consideración después.
1) habitaciones en ocupación cuádruple para todos. eso de "los alumnos no se conocen" no vale tanto dinero. mientras más chavos pasen primero por ONMAPS, habrían tenido que compartir cama ya. ni siquiera los profesores, camas king size para cada uno es un insulto a la situación en general del país. muchos chavos ni siquiera terminan durmiendo en su cuarto o en su cama.
2) el nacional se acaba en viernes, siempre. se pueden hacer juntas más largas el domingo en la recepción o en las horas libres en la tarde después de los exámenes. vamos a trabajar a construir un país y eso, no veo por qué no debería ser cansado.
3) menos coffee break. ¿es necesario? nos alimentan bien, podemos tratar de calmar la ansiedad de cada uno de otra manera. menos galletas y refresco es hasta más saludable.
4) menos paseos. ¿por qué no poner talleres? de lo que sea, que los chavos generen algo más, trabajen juntos por algo más que ese examen. los participantes trabajan sólo nueve horas de toda esa semana. y sí, todavía recuerdo lo que es ser participante.
estas tres propuestas convierten el nacional en más trabajo, menos descanso y menos como unas vacaciones pagadas; mucho más desgastante. las primeras dos propuestas son las principales, las otras dos son quizás exageradas. sí, el trabajo es poco reconocido y eso era un "premio" por el trabajo de todo el año. estas propuestas podrían hacer más sencillo el trabajo de todo el año:
las propuestas (1) y (2) ahorran -en un estimado que me estoy inventando- 600mil pesos (que bien podría ser una exageración a lo mejor poco). no es porque no se pueda conseguir ese dinero, es porque podría estar mejor invertido en otras maneras incluso dentro de la misma olimpiada:
a) se pueden dar más premios que sí influyan directamente en la educación y la ciencia: becas a participantes y entrenadores destacados, equipo, material, etc.
b) se pueden financiar más regionales que mejoran la competencia y acostumbran a los chavales a compartir camas. el nacional costaría menos para un profesor acompañante y cada delegación podría llevar más profesores de tal manera que incluso podría simplemente ocupar el cuarto entre "conocidos". (no que no se pueda tener cama individual, pero sí que eso debería costarle al que la quiere en lugar de ser el estándar.)
c) se pueden ofertar cursos a estados sin que el estado tenga que pagar nada del entrenador que va. cursos programados y bien controlados, no dados a granel al estado que pida más pero quizás sí al que le vaya peor.
d) se puede ayudar a financiar las olimpiadas estatales para los estados que tienen recurso que tiende a cero (como la de san luis, por ejemplo). pagar boletos de camión es sencillamente comprobable.
e) apoyar proyectos de llevar la olimpiada a profesores o a alumnos de manera universal. tener una visión social más marcada y menos elitista (la parte elitista es la primordial, pero no tiene que ser la única).
cualquiera de esas cosas tiene más impacto en la ciencia y la educación que los otros gastos que genera la manera en que se organiza actualmente el concurso. la inequitativa distribución de la riqueza en nuestro país no es algo que debamos tomar por sentado, pero algo que podemos aprovechar para tratar de revertirla.