para cualquier fanático del fútbol, uno de sus sueños más grandes es poder asistir a un partido del mundial. idealmente, uno sueña con asistir a la final y anotar el gol del triunfo. como eso es más o menos complicado, se contentaría con nada más ir a un partido de su país o bien, a uno de los más interesantes. para la mayoría de nosotros, se trata de un sueño muy complicado: estamos hablando de viajar hasta otro continente lejano tan sólo para ver uno o dos o tres partidos, noches en hotel, aviones, comidas extrañas; es mucho dinero para un humilde fanático, aunque no por eso los estadios están vacíos.
hoy cumpliré ese sueño de manera más sencilla: en un partido del mundial sub-17. claro, no están las grandes estrellas del mundo pero algún día lo serán. será uno de los encuentros de cuartos de final, Japón contra Brasil. pero es la emoción, es el ambiente, ir al estadio con mi papá y poder decir que fui a un mundial. es todo y es mucho más fácil que ir a Brasil, Rusia o Qatar de la misma manera que ir a Guadalajara en octubre será mucho más fácil que ir a Londres en un año.