consideramos que crear empleos es tarea del gobierno pero no les damos muchas opciones: no queremos que sea dueño de empresas al punto que hay a quienes quieren que las vendan ni queremos que engorden la burocracia actual -al contrario, nos gustaría que la adelgazaran. probablemente sea necesario mencionar que la gente que le gustaría que el gobierno venda sus empresas es normalmente la que quiere comprarlas, pues son un gran negocio. empresas, empresarios y transnacionales piden menos y menos participación y presión del gobierno; o al menos es así hasta que caen en la bancarrota, cuando le piden al gobierno que los rescate con la amenaza de perder miles de empleos -lo que sigue nos la sabemos bien: el gobierno sale al rescate y compra la empresa carísima, cuando está más sana la vende pero nadie se la quiere comprar ni al costo y todo el país sale perdiendo, recordamos los bancos, e incluso ahora aerolíneas. encima, esta libertad exigida convierte las transacciones en la bolsa libres de impuestos: puedes comprar un banco, una cadena de cines, la mitad de tu restaurante favorito y no pagar un peso de impuestos, pero nada más. con la presión del pueblo desempleado y malempleado, el gobierno se vuelve un agente de ventas, casi un proxeneta: instale su maquiladora aquí que le regalo el terreno, le perdono los impuestos, le capacito a sus empleados. no es tanto que el gobierno sea un mal empresario -que lo es- sino que los empresarios corruptos se han metido a todas partes y firman el cheque y lo cobran, diseñan las licitaciones y las ganan: ellos no viven en ningún país, no dependen de los servicios públicos, no son ciudadanos y por eso no les importa nada; estos empresarios corruptos son las manzanas podridas que tienen a los gobiernos de varios países por el culo, montados sobre la carreta que el pueblo noble, el buen gobierno y el pequeño empresario con tanto esfuerzo jalan.