la próxima vez que un profesor se presente a principio de semestre diciéndote que Yo no vengo aquí a enseñarles nada, pregúntenle si al menos lo va a intentar, pregúntenle si eso dijo en la entrevista de trabajo, pregúntenle si es resignación o cinismo porque para que no nos enseñen nada mejor nos quedamos en casa. los profesores modernos, chéveres, actualizados han caído en un abuso de lugares comunes que es sencillamente ridículo: Aquí todos venimos a aprender, dice, pero no aclara que mientras que él -y todos- aprenderemos algo de la experiencia, los alumnos están ahí para aprender matemáticas, estática de fluidos o neuronas; Yo no lo sé todo, dicen, como si hiciera falta aclarar eso, quizás queriendo decir que no dominan los contenidos del curso; Yo no sé matemáticas, dice el profesor que guiará tus primeros pasos como profesor de matemáticas.
Mi clase no es como la de los demás profesores, dicen todos los profesores al iniciar su clase. le toma quizás media hora de discurso explicarte cómo él no pasará toda la clase hablando, que él desea que el curso sea más participativo e interactivo como si los buenos deseos bastaran. así, para romper los terribles paradigmas educativos de la clase expositiva, juntos descubriremos el agua tibia de sentarnos en círculo, de dividirnos los temas por equipo y hacer presentaciones en PowerPoint.
lo que yo vengo aquí a pedirles es que nos dejemos de mamadas.
profesor, profesora: pedirle a los alumnos que preparen en un par de días y expongan temas complejos que no dominan sólo logrará atentar contra la formación de generaciones completas. la clase expositiva no lo vuelve un mal profesor -ciertamente no lo convierte en conductista- si usted se toma el tiempo para preparar la clase, si usted ofrece ejemplos ilustrativos, ejercicios retadores pero posibles, si su tono de voz y manejo general es agradable. ser un mal profesor lo convierte en un mal profesor, dar malas clases lo convierten en un mal maestro.
recientemente, he tenido airadas discusiones con el profesor y algunos compañeros de la materia de Corrientes Contemporáneas de la Didáctica de la Matemática, del semestre IV. al final del primer día de clases, el profesor le pidió a algún equipo que expusiera -para el día siguiente- el Conductismo. todo. un grupo de compañeros lo hizo, a partir de la información que les entregó el profesor, de lo que ellos mismos pudieron investigar y quizás de lo que discutió en cuatro clases de una materia del semestre pasado. la exposición tomó dos días y mañana nos disponemos a empezar a Piaget.
este escenario sucedió ya en Taller de Integración de Conocimientos I, materia del semestre III. más adelante, se repetirá en Fundamentos Psicológicos del Aprendizaje de las Matemáticas, en el semestre V, en Epistemología de la Matemática, también del semestre V, en Metodología de la Enseñanza de la Matemática I, del semestre VI, y quizás en algunas más. es un escenario muy común en las Humanidades: todos los cursos son introductorios, diseñados sólo para leer a los teóricos a partir de citas y acercarnos a las teorías sólo a través de resúmenes de resúmenes. muchas veces se nos dice que más adelante tocaremos el tema con más profundidad, que el contenido de cada una de las teorías no podría cubrirse siquiera en uno o dos semestres completos, etcétera. el predecible resultado es que nadie -ni los profesores y mucho menos los alumnos- conoce las teorías y sólo hablamos de ellas como un teléfono descompuesto, criticando cuando debemos criticar, alabando cuando debemos alabar.
en el caso específico del conductismo, tanto mis compañeros como el profesor tocaron los siguientes puntos en los que centré mi crítica:
- el conductismo es precursor de las calificaciones y exámenes
- en el conductismo, te califican sólo con el examen final y de ahí si sacas 10 sabes y si sacas 0 no sabes nada sin preocuparse por el proceso
- en el conductismo, el profesor es una autoridad incuestionable
- en el conductismo, los investigadores no comparten su investigación con los demás
- el conductismo es eso que llega el profesor y nada más expone su clase
- lo único que importa en el conductismo es la memoria
y quise empezar por proponer un ejercicio de reducción al absurdo:
pero creo que a nadie le causo ninguna gracia. el punto es: si el conductismo es exactamente lo mismo que la clase tradicional, ¿dónde está la enorme revolución? esas cosas se me pudieron haber ocurrido a mí, es más: se le han ocurrido a cada mal profesor que hemos tenido. así, intenté hacer algunos énfasis necesarios pero no todo lo que escribo aquí lo comenté:imagínense a mitad del siglo pasado, en el más prestigioso Congreso Internacional de Educacion, el doctor B. F. Skinner toma el estrado y dice: Compañeros, les presento la clase expositiva. inmediatamente, académicos y docentes rompen en aplauso con expresiones como ¡Genio! o ¡Brillante!
- la exposición es un recurso didáctico que no es privativo ni característico de ninguna corriente. si los profesores de matemáticas de preparatoria o universidad caen en el abuso de este recurso es porque no tienen más, porque su formación no es de docente, porque es lo mejor que pueden hacer y sin embargo, la clase expositiva puede ser excelente según preparación y dominio; si ésta fuese un recurso conductista, hacer que los alumnos expongan ciertamente no se hace menos conductista.
- todas las corrientes tienen algún modelo de evaluación. ¿qué acaso hace cien, doscientos, mil años no había exámenes y calificaciones? es más: contrario a lo que se hace en una clase tradicional, la evaluación en el conductismo debe ser constante y la retroalimentación inmediata pues sólo así podré asociar la respuesta deseada a los estímulos, y sólo así se puede medir y observar el cambio en la conducta. Skinner tenía unas máquinas de enseñanza que te daban la respuesta correcta inmediatamente y este principio se sigue usando en programas y juegos de computadora. es mucho más conductista calificar contando y promediando la asistencia, la participación, la entrega de trabajos y tareas.
- el conductismo se interesa tanto por el proceso que existe una cosa llamada "aproximaciones sucesivas" en donde se desea precisamente acercarse a la respuesta deseada mediante repetición, mediante pasos previos, con un manejo de tiempos y recursos.
- el profesor es una autoridad incuestionable en muchos ambientes y eso no necesariamente tiene que ver con la corriente o el modelo didáctico: probablemente obedezca a la manera de lidiar con grupos sobresaturados, a la tradición, a un deseo de respeto. la autoridad del profesor dentro del salón existe desde los más antiguos clásicos y sin duda existía en el mundo antes del nacimiento de Pavlov, Watson o Skinner.
- el conductismo no es una respuesta natural a la necesidad de enseñanza, requiere un entrenamiento específico, requiere un conocimiento y una preparación exhaustiva de las sesiones de clases para poder anticipar todas las respuestas posibles y tener un plan de reacción ante ellas que pueda permitir acercarse a la respuesta deseada. el modelo actual mexicano no es conductista: es un amalgama de falta de preparación, de falta de dominio de contenidos, de prejuicios pedagógicos aunados a un contexto complicadísimo: poco tiempo, grupos sobrepoblados, burocracia lenta y exigente, situaciones socioeconómicas dispares, etcétera.
- la memoria es valiosísima en cualquier corriente del pensamiento, no sólo en el conductismo. sin embargo, la asociación que se aprende o adquiere tras programas de condicionamiento va más allá de la memoria: son respuestas naturales e inmediatas que no depende de un uso consciente de la memoria.
el punto general es, pues, que tu mal profesor no era malo porque era conductista, era malo porque era un mal profesor. no lo hago por defender el conductismo -y lo dije así- o porque crea que éste es la mejor corriente jamás ideada, lo hago porque estamos hablando de él con una simplicidad ridícula, estamos hablando y no lo conocemos, estamos criticando y no entendemos: simplemente lo hemos convertido en un saquito para introducir las cosas que nos molestan de la enseñanza y el aula, los hábitos y costumbres más irritantes de nuestros propios profesores. el punto es: si lo que nos han dicho del conductismo está mal, ¿cuándo podemos creerles de lo demás?
he discutido especialmente sobre el conductismo porque es el tema en
cuestión pero estoy seguro que se repetirá cuando empecemos a ver otros
teóricos, cualquier teórico; si acaso los prejuicios serán distintos, lo que tengo claro es que seguirá reinando la desinformación y la superficialidad: seguiremos hablando de lo que no conocemos, de lo que no entendemos. estamos en una comunidad que sostiene que
el conductismo es "la clase expositiva donde el profesor es la autoridad
incuestionable y sólo llega con su libro y pone teorema, demostración,
ejemplo," donde repiten hasta el cansancio que el constructivismo es
"dejar que los niños construyan su propio conocimiento," donde creen que
"un niño de la calle que vende chicles y sabe cuánto tiene que cobrarte
sabe más matemáticas que nosotros porque él tuvo que enseñarse a sí
mismo."
he bromeado con que los contenidos de dichas materias pueden resumirse en los siguientes:
- Introducción a la satanización del conductismo
- Ejemplos piagetanos de cómo experimentar con sus niños
- Contagio por repetición del vocabulario constructivista
cuando dije que nadie, en todas mis materias sobre el tema, me había enseñado qué era el conductismo, el profesor se agarró de ahí para preguntar que si yo era sólo un receptor pasivo, que si yo no iba a hacer nada por mi propia educación porque evidentemente mi profesor no entiende de ironía, porque en estos tiempos modernos, es una petición ridícula que un alumno pida a su maestro que le enseñe. uno de mis compañeros, para risa de la mayoría, pregunto que qué quería, que si quería que corrieran a toda la planta docente para que me trajeran expertos en conductismo. sí, eso quiero. quiero que el profesor titular de una materia en la que se toca el conductismo sea experto en conductismo. quiero que el que impartirá la materia donde hablemos del tema que sea, sea un experto en dicho tema porque para no-expertos, conmigo me basta, porque la sociedad demandará que cualquier tema que nos toque enseñar en el futuro, o lo dominemos o nos hagamos un lado.